A lo largo de esta calle, que durante la Antigüedad lindaba con el mar, se han ido descubriendo diferentes piletas salsarias: En el solar de los números 7 y 9 se documentaron dos piletas orientadas N-W separadas por una hilada de ladrillos y piedras enlucidas por argamasa (Duarte, 1991: 338-341).
En otra intervención puntual más reciente entre la calle Cañón y Postigo de los Abades, se han documentado tres piletas con indicios de una cuarta dispuestas en una suave pendiente hacia el NW en dirección a la linea de costa. De ellas solo la número 1 se excavó parcialmente, sellada con carbón y restos de ánforas (Keay LXI y LXII parcialmente quemadas).
En cuanto a la pileta 3, sólo se pudo delimitar su superficie, 2,20 m por 1,70 m, y rebajarse solo 54 cm en su interior pero se documentó un probable ocultamiento monetario, diverso material de construcción (ladrillos, tégulas) y cerámica de cocina (Mora y Martínez, 2008).En trabajos que se han llevado a cabo en 2015 para la peatonalización del entorno de la Catedral, se han podido documentar nuevas piletas en esta calle (inéditas).
En las muestras analizadas por la Dra. Carmen Lozano procedentes de la pileta de Cañón/Postigo de los Abades, se han hallado ostras. En el sedimento se identifican cuatro especies de peces: sábalo, pez gallo, congrio y sargo (Corrales y Compaña, 2014).
Siglos IV-VI d.C.
En el interior de la pileta 1 de Cañón/Postigo de los Abades, formando parte de los diferentes vertidos que han podido documentarse, cabe mencionar varios fragmentos amorfos de ánforas, algunos bordes y fondos de TSA D, y un fragmento de lucerna del tipo Atlante X. Destaca la presencia de cerámica de cocina con bordes de cazuelas fabricadas a torno lento, además de ollas de la misma factura con mamelones a modo de asa, decorados con digitaciones; se trata de producciones locales típicas de los siglos VI y VII d.C. a los que hay que añadir dos bordes de spatheia (Keay XXVI) de cronología algo anterior. No faltan tampoco fragmentos de jarros, platos-tapadera y cuencos de cerámica tosca tardía típica del siglo VI d.C. De aquí procede una moneda.
En la pileta 3, la aparición de dos fragmentos de pátera de TSA D, estampilladas en su fondo interior con un crismón, perteneciente al estilo decorativo Eii, datable entre los años 530-600 d.C., y, sobre todo, una boca de ánfora del tipo Keay LIII, documentada también en contextos de inicios del siglo..VI.. Entre el segundo cuarto del siglo VI y mediados de esta centuria se fecha un conjunto de 76 monedas documentadas en esta pileta (Mora y Martínez, 2008).
Pilar Corrales Aguilar, «Calle Cañón (Málaga, Spain)», RAMPPA, Atlantic-Mediterranean Excellence Network on Ancient Fishing Heritage (http://ramppa.uca.es/cetaria/calle-canon), 28 November, 2016.