En la documentación fotográfica del desmonte de la tierra que cubría el edificio escénico en la década de los 50, nos muestra que en esta ladera norte del Monte de la Alcazaba se repite una dinámica similar a la constatada en la vertiente méridional: eran muchas las piletas destinadas a salazones que cubrieron esta ladera y toda la zona meridional.

Así, ya en las intervención que realizó D. Pablo Sólo de Zaldívar en 1957, se localizó una primera pileta delante de la Casa de la Cultura (Corrales, 2007: 60). A partir de este momento y, aunque la dinámica de extracción de tierras a la que fue sometido este lugar tras su descubrimiento ha hecho perder una parte importante de las fases tardías del mismo, hay datos suficientes que permiten reconstruir el espacio anteriormente ocupado por el teatro, durante la etapa bajoimperial como una suave ladera sobre la que se fueron disponiendo piletas que descienden desde lo que fue la zona más alta del graderío hasta ocupar el nivel de la actual calle Alcazabilla.

Aquí, la presencia de piletas salsarias se han podido confirmar en las intervenciones realizadas en los últimos años a cargo de D. Manuel Corrales: En la zona suroccidental del ángulo del teatro, una primera factoría de salazón se implantó a mediados del siglo III con un abandono intencionado  de la misma, con piletas que aparecen colmatadas de manera intencionada con materiales constructivos.   Las piletas tienen planta rectangular de unos 2 metros de lado, con una profundidad, ligeramente superior a los 2 m y un volumen de producción de 6 m³.

Sobre ella, una nueva batería de piletas que sufrió el desplome accidental del sistema de cubiertas, abandonándose a finales del siglo IV d.C. Durante el siglo V, nuevas instalaciones de producción de salazón fueron elevadas en el sector, aunque solo están documentadas a partir de la presencia de materiales en las series de capas de limpieza de estas factorías (Corrales, 2007).

Estas instalaciones se han documentado a lo largo de toda la calle. Así, la intervención realizada en 1996 en la boca del túnel de la Alcazaba, bajo la dirección de Dña. C. Iñiguez, puso al descubierto dos piletas junto a otras estructuras relacionadas con una factoría de salazones destruida entre los siglos I y II d.C. por una avenida de agua del arroyo que transitaba por sus inmediaciones. 

En la vigilancia arqueológica dirigida por  Dña. M. I. Cisneros para la adecuación del Palacio de la Aduana como Museo Arqueológico y de Bellas Artes, se documentaron distintas baterías de piletas en distintos puntos del edificio, aunque en su mayoría no se llegaron a excavar (inéditas).

En el numéro 5 de la  actual calle Marquesa de Moya, frente al Teatro romano, en una intervención puntual se documentaron tres piletas, aunque presumiblemente continuarían por toda la zona circundante. Presentan factura de mampostería revestidas de opus signinum, carentes del bocel a media caña, aunque el alzado de sus paredes es redondeado. Activas entre los siglos IV al VI d.C. (Ïñiguez, 2010: 2405-2423).

Ressources marines

Se han podido documentar diversas muestras ictiológicas en varias piletas localizadas sobre el solar del Teatro romano y en la inmediata factoría de la calle Alcazabilla. Las analíticas realizadas por la Dra. Carmen Lozano han documentado, por lo general, una composición piscícola muy variada, como  en una de las piletas localizadas en el Corte 25, con predominio de boquerón seguido del serrano. Además aparecen congrio, aguja, sardina, argentina, synodus, brótola, jurel, boga, sargo, etc. (Corrales, 2007: 73).

En otra excavada bajo el actual Centro de Interpretación, las muestras ictiológicas presentan un cierto predominio de boquerón y la sardina. Las sardinas predominan en diversas muestras (Corte 25. UME 1, 25/1145, Corte 25.I.2 Pileta (1989). 25/051, C/25. Sector IV. 25/1320, Corte TRM 01 C/25. Sector III. 25/516).

También es significativa la presencia de atún: TRM09 Corte 1. Aditus sur capa 6, núm. Inv. 77, TRM09 Corte 1. Aditus sur capa 9, núm. Inv. 122, TRM09 Corte 1. Aditus sur capa 11, núm. Inv. 159, TRM09 Corte 2. Aditus sur, sector Norte, capa 18, núm. Inv. 163, TRM09 Corte 2. Aditus sur capa 27, núm. Inv. 585.

TRM09 Corte 2. Aditus sur. Fosa bajo capa 18, vértebra de cetáceo, núm. Inv. 886.

Así mismo, en las excavaciones realizadas en el aditus sur se han documentado 20 especies de moluscos de los cuales 12 son gasterópodos. En general, la rotura de forma irregular de conchas de los bivalvos y gasterópodos indican que las conchas se rompían para extraer su carne.

Por otra parte, en una pileta del Palacio de la Aduana se documentó 27 especies de pequeño tamaño, lo que evidencia un predomino de especies variadas y de pequeño tamaño en las producciones de esta localidad (Corrales y Compaña, 2014: 62).

Chronology

siglos I - V d.C.

Con diversas cronologías por La gran cantidad de piletas que se documentan por todo este área de la ciudad aportan cronologías diferentes de uso y amortización de las mismas: Desde las más antiguas, las localizadas bajo el túnel de la Alcazaba (siglos I y II d.C. a las más tardías, las fechadas en los siglos IV-V d.C. según los materiales cerámicos documentados.

Bibliography

• Corrales Aguilar, P.; Compaña Prieto, J.M. 2014, "Continente y contenido de las ánforas salsarias malacitanas en época romana: avances de los resultados ictiológicos y arqueométricos", In: Centro y periferia en el mundo clásico, XVIII CIAC Mérida. pp. 139-142.
• Corrales Agular, M. 2007, "El teatro romano de Málaga: evolución de un espacio", Mainake, vol. 29, pp. 53-76.
• Íñiguez Sánchez, C. 2010, "De la ciudad tardoantigua a la islámica. Secuencia estratigráfica de un espacio urbano (sondeo en calle Marquesa de Moya 5 de Málaga)", In: Anuario Arqueológico de Andalucía, 2005, Sevilla. pp. 2405-2423.